Prueba: Cupra Formentor VZ5
28 diciembre, 2023Os traemos la prueba del Cupra Formentor VZ5, la versión más radical del coche que está arrasando en ventas, pero con extra de picante
Desde que nació la marca Cupra como firma independiente de SEAT, y más concretamente desde la presentación del Cupra Formentor, el éxito de este crossover no ha parado de crecer.
En un mercado plagado de, cada vez más, nuevas y variadas propuestas, el que nos ocupa se ha propulsado hacia la cumbre y con versiones tan emocionantes como este Cupra Formentor VZ5 con más motivos.
Aspecto exterior
A un servidor, el diseño del Cupra Formentor le parece un acierto, ya que, partiendo de la base del León de 4ª generación, no solo mejora su diseño con los plásticos habituales de los crossover, sino que han logrado conferir un aspecto más agresivo que el del famoso compacto de SEAT/Cupra.
La parte delantera une a su gran parrilla de tipo «flat nose», unos faros antiniebla redondos ubicados en la parte intermedia del paragolpes, lo cual nos parece un acierto del equipo de diseño, ya que quedan a una altura suficiente para no recibir impactos de piedras o de aparcamiento.
Y si bien por fuera el aspecto es idéntico al de cualquier Formentor que podemos ver por la calle, hay una serie de detalles que nos indican que estamos ante un Formentor especial, la versión VZ5 (VZ, apócope de veloz, y el 5, indicando el número de cilindros que se encuentran bajo el capó de nuestro invitado).
Dichos detalles, en la parte delantera, son unos añadidos en carbono en el splitter bajo el paragolpes delantero, unas llantas en el color cobre representativo de la marca Cupra, en unas generosas 20 pulgadas, y una trasera con un difusor en carbono, rematado por cuatro colas de escape colocadas en diagonal y también pintadas en color cobre.
Y no solo se queda ahí, sino que, además, incorpora unos tremendos discos de freno de 370 mm, junto con unos portapinzas, también en cobre, firmados por la marca Akebono, y que en su interior dan cabida a seis pistones para detener los casi 1.700 kg del bicho. Casi nada al aparato.
Interior del Cupra Formentor VZ5
Por dentro, si bien la base es similar a la de cualquier Formentor que vemos por la calle, en seguida nos damos cuenta de que estamos ante algo muy serio: equipa, previo pago, unos magníficos buckets de la marca Sabelt que nos sujetan a la perfección en el desempeño de conducción espirituosa que tanto nos gusta.
El segundo de los cambios más evidentes lo podemos ver en el volante, que incorpora botones satelitales para arrancar el motor y para cambiar entre los diferentes modos de conducción: individual, off road, comfort, sport y Cupra. Y también observamos un modo drift, que nos permitiría «jugar» con el coche en circuito.
El espacio interior es bueno, para que cuatro adultos viajen adecuadamente en sus plazas (como siempre, cinco adultos irían justos, para eso hay otros vehículos más grandes).
El maletero del Cupra Formentor es un poco exiguo, cubicando la cifra de 450 litros, que en la práctica suelen ser suficientes para llevar un par de maletas de tamaño mediano.
El puesto de conducción no es propio de un SUV, ya que el asiento se puede colocar cerca del suelo del vehículo resultando una posición más cercana a un compacto convencional que a un SUV normal y corriente. El capó es largo, plano y ancho, lo que nos ha incomodado ligeramente a la hora de maniobrar en lugares estrechos.
La pantalla que se encarga del infoentretenimiento es suficientemente grande, y aglutina los mandos del climatizador, asientos calefactados, etc. Como suele ser habitual, esta práctica actual nos parece una distracción que se podría evitar con los tradicionales mandos y botones físicos.
Prueba de conducción del Cupra Formentor VZ5
Tras accionar el botón del volante creado al efecto de poner en marcha el motor, este nos da los «buenos días» entonando su sinfonía que nos dan sus 5 cilindros, capaces de producir 390 CV, acompañados del sonido del escape, en un coldstart de los que te ponen «al ataque» desde el primer minuto.
Tras ponernos en marcha, a los pocos kilómetros ya nos hemos hecho al coche y nos ha transmitido unas muy buenas sensaciones: balanceo mínimo, mucha agilidad a la hora de cambiar de trayectoria y, en general, un tacto de conducción muy gratificante.
Si se conduce en modo confort, es posible llevar el Cupra Formentor VZ5 en modo tranquilo, buscando unos consumos contenidos (aunque en nuestra prueba no hemos conseguido bajarlo de 11 litros a los 100)… pero cuando se activan bien el modo sport o, mejor, el Cupra, el coche se transforma de Dr. Jeckyll en Mr. Hyde.
Cuando se seleccionan los modos de conducción más extremos (Sport o CUPRA, especialmente este último), la sensación es la de estar llevando un coche ligero (que realmente no lo es; pesa 1686 kg), de reacciones rápidas y precisas y en el que es posible modificar la trayectoria en curva con los pedales.
Punto aquí para hablar de un sistema de tracción total con una excelente puesta a punto (no olvidemos que monta el mismo motor que el Audi RS3/RSQ3) y un equipo de frenos que nos ha parecido sublime, ya que nos permite retrasar la frenada hasta el último momento y no han presentado fatiga tras un uso intenso.
Quizá, como punto mejorable, nos centraríamos en la suspensión, ya que si bien tiene hasta 30 modos diferentes de tarado, no resulta dura en exceso, priorizando más el confort que la efectividad pura y dura, lo cual resta un poco de confianza cuando vas en modo full attack.
El cambio automático de doble embrague DSG cuenta con 7 marchas, es rápido a las insinuaciones que se le hacen desde el pedal derecho (siempre que vayamos en modo S o S+) y, si se activa el modo «manual», nos permite llegar al corte de inyección sin cambiar a la siguiente marcha, lo cual se agradece.
En cuanto al motor del Cupra Formentor VZ5, lo hemos notado lleno en prácticamente todo el régimen de giro, amén de contar con un sonido muy bonito.
Si bien a partir de la zona media es donde más se le va a sacar partido al bloque 2.5 turbo gasolina de 390 CV y 480 Nm de par máximo lo que nos ha permitido salir siempre con la fuerza suficiente de cada curva para enlazar la siguiente con gran celeridad, de hecho, hace un 0-100 teórico en 4,2 segundos.
Conclusiones finales, opinión y precio
Si buscas un crossover deportivo con el que llevar a la familia y a la vez darte un capricho los fines de semana, la prueba del Cupra Formentor VZ5 nos permite afirmar que es el coche que buscas.
Podrás transportar a tu suegra sin que se queje por la dureza de la suspensión y a la vez disfrutarás de un chasis muy bien puesto a punto.
El precio oficial del que partía fue de 62.840 euros, ya que se trata de una versión con unidades limitadas (tan solo 7.000 ejemplares del Cupra Formentor VZ5 fueron fabricados) que se comercializaron desde finales del año 2021, y que muy posiblemente estén en totalmente vendidas.