Prueba: Opel Astra Sports Tourer GS PHEV
11 junio, 2024Híbrido enchufable, carrocería familiar y un acabado deportivo. La prueba del Opel Astra Sports Tourer nos dejará resulta la duda de si por lo que vale este coche merece lo que cuesta.
Tenía ganas de subirme a la versión familiar del del Opel Astra. La última vez que pude conducir un Opel «ranchera» fue en la presentación del difunto Opel Insignia Sports Tourer allá por el año 2020.
Ahora, para los clientes de Opel que quieran un coche híbrido enchufable con un maletero grande (fíjate que no he usado el concepto «coche SUV«) necesitan acudir obligatoriamente al Astra Sports Tourer PHEV como única opción en el catálogo de la marca.
¿Cómo es el Opel Astra familiar por fuera?
Realmente bonito.
Al margen de mi apreciación personal, este coche nace de la plataforma de Stellantis EMP2, la misma que hace lo propio con su primo el Peugeot 308, lo que supone fijar unas dimensiones de 4,64 metros de largo; 1,86 de ancho y 1,48 de alto con una distancia entre ejes de 2,73 m.
Esto quiere decir que tenemos un Opel Astra Sports Tourer de 5 plazas y una carrocería propia de los turismos familiares compactos. La unidad utilizada en este test equipa un sistema de propulsión híbrido enchufable asociado a una caja de cambios de 8 velocidades y el equipamiento GS. Es decir, que con todo y esto, tenemos la prueba del Opel Astra Sports Tourer PHEV GS AT8.
Estéticamente coincide con aquel Opel Astra PHEV GS que ya probamos, pero una mayor batalla del familiar respecto del compacto de 5 puertas (6 centímetros) y una carrocería shooting brake 26 cm más larga denotan las significativas diferencias visuales.
Habitabilidad y confort del Opel Astra Sports Tourer
Me sigue chocando en esta última fase de Opel dentro del grupo Stellantis cómo al sentarse y sentirse a bordo de un Opel uno se traslada con facilidad a, por ejemplo, los coches de Peugeot o incluso, los Jeep. Herencias irremediables que deben compartir los miembros de una misma familia. Bueno para unos, Opel, en este caso, no tanto para otros (DS).
En este caso es favorable para Opel ya que adquiere elementos considerados de mayor calidad o nivel dado su posicionamiento, sobre todo entre las marcas Stellantis.
A esto se le suma un evidente estilo de diseño germánico: sobrio (e incluso algo insulso) y frío, pero práctico y hasta atractivo.
Por ejemplo, el salpicadero tiene unas líneas muy limpias, sin concesiones a la fluctuación, donde se insertan las dos protagonistas del mismo: las dos pantallas. Una tras el volante, otra en el centro de la consola, ambas sin visera ni protección alguna, totalmente inscritas en perpendicular al suelo y en paralelo a los ocupantes. Ni bueno ni malo: práctico, porque su posicionamiento, visibilidad y manejo es claro y conciso.
El volante, por otro lado, añade un radio más que, por ejemplo, los del i-cockpit de Peugeot que tanto me gustan. Así se da lugar a un timón casi circular, ligeramente achatado por abajo, muy cómodo y agradable al tacto.
Una de las cosas que más me gusta del Opel Astra GS Line es el pedalier y el reposapiés sobre el paso de rueda, muy deportivos. Pero si tuviera que elegir lo mejor de este equipamiento son sus asientos.
De entrada, la ubicación en la posición del conductor es excelente, gracias al reglaje totalmente personalizable, se permite la colocación al gusto del que comanda este coche.
Y es que, como una de las diferencias y novedades que me he encontrado en la prueba del Opel Astra Sports Tourer PHEV respecto del 5 puertas son las butacas.
Las que equipaba el familiar se situaban, según el fabricante 12 milímetros por debajo de los de la anterior generación, además, gracias a ofrecer 8 regulaciones manuales, cojín extensible, regulación lumbar ajustable en 4 vías y 18 direcciones, la experiencia dinámica y las sensaciones deportivas durante la conducción de este coche familiar me han sorprendido gratamente, aunque ese apartado lo abordaré más adelante.
La comodidad del asiento del conductor del Opel Astra familiar me ha parecido prácticamente inmejorable, algo que he replicado en la banqueta yendo de acompañante.
Las plazas traseras del Opel Astra Sports Tourer son correctas para dos ocupantes sentados tras las delanteras, pero la central se queda relegada a un uso esporádico.
Pensando en cuatro ocupantes y situado el asiento del conductor a mi gusto, condicionado por mi estatura (1,76), el espacio libre entre mis rodillas y el respaldo queda como se ve en las fotos mientras que mis pies quedaban limitados por la arquitectura de este coche híbrido familiar.
De cintura para arriba, gracias a su carrocería, el espacio para los hombros y la distancia desde la cabeza al techo son más que suficientes como para sentirse cómodo, es más, gracias a la instalación del techo solar que la unidad de la prueba del Opel Astra Sports Tourer GS instalaba aumentan el aire interior.
Ahora, que si de espacio se trata, lógicamente uno de los puntos de interés de este coche sea su zona de carga.
El maletero del Opel Astra Sports Tourer PHEV
Según la homologación, el maletero del Opel Astra familiar híbrido enchufable cubica 516 litros, casi 80 menos que las versiones que no equipan el sistema PHEV y unos 160 más que el ya nombrado 5 puertas.
Ahora, si nos centramos en la capacidad real de la bodega de este coche te diré que he metido de una tacada una maleta familiar, una mediana y una pequeña en él además de varias bolsas de plástico con achiperres varios por los huecos que quedaban.
Además, gracias a la altura del suelo de la boca de carga, resulta fácil subir y bajar este tipo de bultos.
La conducción del Opel Astra Sports Tourer híbrido enchufable
Como te decía, tengo fresca el test y mi opinión del Opel Astra PHEV GS Line de 5 puertas lo que me permite decir que, no solo una de las impresiones que me llevo del familiar es que su arquitectura mejor su dinamismo sino que, en conjunto, me ha parecido hasta más deportivo que el compacto.
Este coche que equipa un motor 1.6 turbo que produce 150 CV de potencia y otro eléctrico de 110, en conjunto puede desarrollar hasta 180 CV para mover un coche familiar híbrido enchufable que pesa unos 1.720 kg, una potencia total suficiente no solo para circular en condiciones aburridas sino para salir con alegría según qué situaciones y para moverse con desenvoltura en otras más propias de la conducción deportiva.
Quiero mencionar que aunque la caja de cambios AT8 de Opel es automática es posible manejar sus velocidades a través de las dos levas tras el volante. En este caso, si bien no actúa como un cambio inmediato ni radical, cuando se activa el modo Sport, entre los tres disponibles (ECO e Híbrido, además del citado) el coche responde bastante mejor de lo que podría esperarse y es interesante gestionar la marcha a través de las palancas + y -.
Tanto el motor de gasolina como el eléctrico, cuando relegan al otro al descanso, dejan un coche muy noble de conducir y que se mueve con facilidad, quizás el mayor problema del Opel Astra híbrido enchufable con carrocería familiar es a la hora de aparcar, por su longitud y sus ángulos muertos.
Quitando eso me ha gustado mucho conducirlo por ciudad y más por carretera interurbana.
En cuanto a esto, al ser un coche híbrido enchufable con carrocería familiar el gasto de gasolina depende por completo de la autonomía eléctrica, según su ficha, 57 km.
Yo no he podido aprovechar ese rango, lo máximo han sido 48. En ese caso y al llegar a los 100 km recorridos, aprovechando toda la electricidad almacenada y regenerada, el consumo medio del Opel Astra PHEV Sports Tourer fue de 1,8 litros.
Cuando me quedé sin electricidad almacenada, los inmediatos kilómetros se recorrieron a una media de 4,8 hasta llegar al destino, pero me temo que a mayor distancia recorrida sin el apoyo del alivio eléctrico es fácil que el consumo en un viaje por vía rápida y a velocidades próximas a las máximas legales suba y se posicione entre 6-7 litros, y aumente al activar el e-Save, programa de regeneración eléctrica en movimiento y que supone un esfuerzo añadido que ha de soportar el motor de gasolina.
Opinión del Opel Astra Sports Tourer híbrido enchufable
Llegados a este punto de la prueba del Opel Astra Sports Tourer GS PHEV es el momento de hablar de su precio para poder hacer una valoración del producto.
Según el configurador de Opel, estamos hablando de un coche familiar híbrido enchufable de menos de 40.000 euros, para ser concretos, desde 39.800.
A partir de mis impresiones dentro del coche, su aspecto y su manejo, el precio me parece realmente ajustado y correcto. Es un coche bonito, muy bien puesto y con una motricidad que ha satisfecho mis exigencias por un PVP que, según cómo está el mercado, parece incluso hasta razonable.