Nissan Townstar Combi Tekna 1.3 turbo gasolina

14 febrero, 2025 Desactivado Por Divex Motor

Probamos la Nissan Townstar Combi con acabado Tekna, la furgoneta de pasajeros de Nissan que deriva de la gama de vehículos comerciales ligeros y que se alza como uno de los mejores modelos como vehículo familiar

Jamás se me había planteado la posibilidad de probar un coche de prensa ni tan «viejo» ni durante tanto tiempo, pero esto que te anuncio ya es realmente bueno para el caso. Y me explico.

Cuando me planteé escribir la serie sobre furgonetas familiares que estamos haciendo en Divex Motor como alternativa a los malditos SUV que todo lo acaparan, lógicamente una de mis prioridades fue hacer una prueba del Nissan Townstar, como melliza de la Renault Kangoo (próximamente aquí también) y de la Mercedes Citan, la eléctrica ya disponible.

Pues bien, cierto es que antes de recoger la unidad que nos ocupa, supe que la cesión de la misma sería por casi 3 semanas, ocupando la totalidad de las fiestas navideñas, uno de los momentos del año que más kilómetros recorro y que, por motivos obvios, más cargado viajo.

Pero no solo por la amplitud del préstamos aluciné, lo que también me sorprendió fue ver la placa de la unidad en cuestión su cuentakilómetros: matrícula con letras LXR, mediados de 2022, y casi de 25.000 km de rodaje, ergo, esto podría llegar a considerarse casi cómo un artículo triple.

Por un lado, dar mi opinión sobre la Nissan Townstar como vehículo familiar para el día a día y como furgoneta de carga y pasajeros y, por otra parte, analizar cómo soporta el paso del tiempo y de los kilómetros una Nissan Townstar. Y así haré.

Estética y características exteriores del Nissan Townstar Tekna

Más allá de gustos, este vehículo tiene unas dimensiones de 4,49 de largo; 1,86 de ancho y 1,83 de alto, homologa 5 plazas y tiene un espacio de carga ideal para llevar los archiperres de una familia o el perro de la misma.

Exteriormente y estéticamente, junto con la Peugeot Rifter, también próximamente en nuestra sección de pruebas, es la furgoneta más bonita que se vende actualmente, y se diferencia, por ejemplo de la Kangoo sutil pero acertadamente, en cambios en sus faros y la calandra sobre el paragolpes, el resto, es igual que su emparentada rival.

En el caso de la que he disfrutado te diré que estéticamente estaba impoluta, debido posiblemente al buen mantenimiento de la marca, pero es que interiormente estaba igual: perfecta. Además, al tratarse del equipamiento tope de gama, el Nissan Townstar Tekna monta unas bonitas llantas de 16 pulgadas donde el negro y el gris metálico combinan y alternan de manera elegante en contraste con el rojo grana de la carrocería.

Llama la atención que un vehículo así, con cerca de 3 años y con tal tute en sus cueros aguante sin ningún rastro de desgaste flagrante la retahíla de cesiones que, como pude comprobar por la documentación encontrada en la guantera, había sufrido.

Análisis del interior del Nissan Townstar Tekna

Un punto, qué digo, un puntazo a favor de la resistencia de los materiales del habitáculo.

Volviendo a la habitabilidad y confort de Nissan Townstar, he de decir que una de las cosas que más me ha gustado de este modelo es sus asientos delanteros. Muy cómodos para viajar en ellos, lo suficientemente ergonómicos cuando las inercias desplazan el tronco hacia sus flancos y muy confortables cuando te toca esperar a alguien en este automóvil.

Las plazas traseras cuentan con tres plazas, reales, para tres adultos, siempre y cuando se cumplan unos condicionantes. El primero, que quien que vaya en medio no sea demasiado grande ni alto, aunque esto es también aplicable a los que se sienten junto a las puertas ya que, como pude comprobar, ajustando el asiento delantero a mi altura (algo más de 1,75), en parte debido a la bandeja practicable que equipa la Nissan Townstar Tekna que te presento, dispone de muy poco espacio entre las rodillas y el tablero.

Es cierto que éste sea uno de los peores aspectos del Nissan Townstar, que no es especialmente amplio para viajar cómodamente si lo hacen adultos, en mi caso han viajado mis dos hijos, uno de ellos en su silla infantil, la otra no, y han ido a cuerpo de rey. Además, al disponer de salidas de aire y puntos de carga para estas plazas, el acabado Tekna le aporta un plus de interés.

Si te interesa, la banqueta trasera se divide en dos partes, 60:40, es decir, una mayor que la otra, lo cual puede condicionar la distribución de los bultos que lleves en el cajón de carga. Aún así, como vehículo para una familia con sus bultos habituales (maletas, carros de paseo, trastos inútiles de todo tipo…) cumple y con creces.

El acceso a estas plazas es a través de las puertas deslizantes, bien prácticas a mi parecer, y no especialmente pesadas, de apertura relativamente fácil desde en el interior y con una amplitud de hoja generosa para hacer el ascenso o descenso.

Volviendo al interior de la Nissan Townstar Tekna, desde la posición de conducción y/o copiloto, la bandeja sobre la cabeza de ambas plazas permite alojar también trastos o enseres de cierto volumen, ampliando así su capacidad de carga o traslado de cosas. El fabricante dice que, entre este y otros huecos de almacenamiento, puedes llevar casi 50 litros de cosas.

Puede parecer algo raro decirlo, pero, desde estas mismas plazas, me ha gustado el aspecto del salpicadero y el tacto de los materiales, habida cuenta de los citados materiales distinguidos usados en la tapicería (símil de piel), total o parcialmente. Igualmente, hay que destacar lo bien que se encontraban en esta unidad de la Nissan Townstar con el acabado más caro, lo que me hace pensar que aguantan bien el machaque del día a día, incluso, en un vehículo de estas características que pasa por tantas manos, al que sube tanta gente y al que se le pueden dar usos tan dispares cuando uno se plantea qué objetivo tiene cuando hace la prueba de según qué vehículo.

Los botones de la consola central y la pantalla protagonista de la misma, de 8 pulgadas, resultan muy prácticos ya que, al ser analógicos, permiten aprender y ejecutar rápido las funciones que operan, y, aunque la interfaz digital mostrada en la pantalla resulta ya anticuada en su aspecto, igualmente es práctica ya que es fácil de entender, de aplicar y de moverse en sus menús. Lo siento al que no le guste, pero cada vez me siento más cómodo con coches con soluciones tecnológicas simples y eficaces que con vehículos ultra modernos y complejos.

Tras el volante, el cuadro de instrumentos casi completamente analógico, sitúa en el centro otro pequeño marcador digital, lo que conocíamos como el ordenador de a bordo que tan útil resulta marcando lo justo y necesario según le pidas que haga a través de uno de los botones ubicados en el volante.

Como te decía, si algo se me ha quedado en la retina y en la memoria es el ambiente de (cierta) calidad y (relativo) atractivo del Nissan Townstar Tekna, es decir, que para ser una furgoneta familiar, alternativa a los añorados y extintos monovolúmenes familiares, luce y se siente realmente bien.

Pero no voy a acabar el análisis del habitáculo de este vehículo sin meterme, literalmente con su compartimento de carga principal.

Capacidad de carga del Nissan Townstar Combi

El maletero del Nissan Townstar cubica 775 litros de por sí. Llega hasta 2.800 si abates los asientos traseros, que ya te digo que algo que no me ha gustado aquí es que no se abaten del todo, es decir, que no puedes hacer un fondo plano desde los delanteros hasta el portón. Te lo digo, principalmente, por si estás pensando en comprar una furgoneta familiar para acampar o hacer noche en el coche, ya que algo inclinado vas a estar, como si metieras una cuña bajo el colchón de una cama.

Por otro lado, dado el espacio propio del maletero del Nissan Townstar y junto con los enganches del piso del mismo, te aseguro que es uno de los mejores coches para viajar con perros que puedes comprar.

La conducción del Nissan Townstar 1.3 de gasolina

El motor turbo que equipa la Nissan Townstar Combi Tekna que he probado es el bloque de 4 cilindros, 130 CV de potencia, 240 Nm de par y que transmite su trabajo al eje delantero a través de una caja de cambios manual de 6 velocidades. Aquí no hay electrificación que valga y, o tenemos la versión 100 por 100 eléctrica o, como en este caso, la gasolina, no hay Nissan Townstar híbrida.

Con todo y esto, nos ponemos al volante de una furgo que, solo en vacío, pesa 1.550 kg y que dispone de una potencia exigua y condicionada a la respuesta de un motor asistido por una turbina… como puedes hacerte a la idea, la respuesta mecánica no es su fuerte.

No te diré que la potencia quede comprometida, pero me gustaría disponer de mayor par, sobre todo, par, para dar un buen pisotón al acelerador y conseguir más velocidad en según qué momentos, por ejemplo, esto en los vehículos o furgonetas familiares eléctricas que hemos probado, con una potencia similar, responden mejor, por la propia naturaleza de sus mecánicas.

La respuesta de la dirección es correcta. La carrocería no sufre excesivamente los lances de sus dimensiones y, en parte, si bien no es tan dura como me resultó la Tourneo Courier, ofrece un balance muy lógico entre el confort que supone poder pasar los resaltos de ciudad sin tener que clavar frenos y una ligera deriva lateral cuando la inercia propia de una curva, tipo glorieta de amplio radio, se aplica sobre este tipo de vehículos.

Pero es cierto que es un motor progresivo, equilibrado y agradable de usar, sobre todo, porque, de nuevo, un punto a favor de pensar en comprar una Nissan Townstar de segunda mano, me ha resultado poco rumorosa en marcha. Al contrario que me sucedió con la Ford Tourneo Courier, ni por el propio ruido del motor ni por la propia marcha del vehículo sobre el asfalto, la insonorización de la que nos atañe es muy destacable.

Respecto de «grillos» interiores posiblemente causados por el paso del tiempo, en algún momento me pareció recibir alguno de la parte trasera izquierda, posiblemente propio de algún panel algo suelto, pero nada mecánico.

Como te decía, la mecánica me ha parecido agradable incluso en ciudad, a pesar de contar con una caja de cambios manual, en una época en que el gran público prefiere las automáticas para olvidarse del tercer pedal, si bien resulta algo asistida y un tanto artificiosa, la alternancia entre velocidades se realiza de forma rápida y dinámica, también útil cuando se circula en vías rápidas y se busca el punto de máximo aporte energético del motor.

Si estás pensando cuándo te voy a anunciar el consumo de gasolina de la Nissan Townstar 1.3 Turbo, llega ahora. Como te decía, te recuerdo que he tenido este vehículo a mi cargo durante 3 semanas y que, puesta a 0 en el momento de inicio de este test de larga duración, he recorrido más de 1.000 kilómetros con ella, la mitad calzados en dos trayectos de 250 km cada uno, el resto, mayoritariamente en ciudad y con alguno en vías interurbanas.

Con todo y esto, la media de combustible gastado a la devolución ha sido de 6,3 litros, bajando en casi medio litro el homologado.

Conclusión y valoración final de la prueba del Nissan Townstar

Como creo que ya has podido entender, estoy muy satisfecho de mi experiencia a bordo de esta furgoneta familiar. En esta serie que estamos dedicando en Divex Motor, es, posiblemente la que más me haya gustado por su equilibrio global e, incluso, apariencia tras estar rodando y pasando por los diferentes equipos de pruebas de otros colegas de gremio.

Al margen de esto, creo que por los 31.600 euros que cuesta, el precio del Nissan Townstar Combi Tekna gasolina merece mucho la pena, tiene una coherencia entre lo que ofrece y lo que cuesta, lo que supone el reparto de su importe entre las plazas y la capacidad de carga, lo que te da y lo que te requiere (en cuanto al consumo de combustible).

Galería adicional: prueba Nissan Townstar Combi Tekna

Es cierto que, como ya me ha pasado con, por ejemplo, la citada furgoneta de Ford, echo en falta una microhibridación en este tipo de vehículos que permita, si bien no tanto reducir el gasto de gasolina, sí disponer de una pegatina azul y verde en vez de la etiqueta C que luce, haciendo así de la que no dispone de la llave de acceso a las zonas de bajas emisiones y un salvo conducto para ahorrarse unos eurillos aparcando en las sangrantes e inmorales zonas azules o verdes de ya casi cualquier municipio relativamente poblado.

Para finiquitar la prueba del Nissan Townstar Tekna, solo puedo decir que sí, que es un estupendo monovolumen familiar, polivalente y práctico para vivir con él el día a día de las rutinas de una familia o, incluso, de algún profesional que necesite tanto viajar con pasajeros a su lado o con bultos o aparataje relativamente amplio en sus labores.