
Prueba: DS 7 Plug-In Hybrid AWD 300
24 octubre, 2024Nos subimos al DS 7 Plug-In Hybrid AWD 300 Antoine de Saint Exupery, el también conocido como DS 7 Crossback E-Tense 4×4 pasa por nuestro equipo de pruebas para demostrar cuán elitista es este SUV de etiqueta
Hacía alrededor de un lustro que no hacía una prueba de un DS 7. Por devenires varios, los modelos de la marca premium de Citroën habían quedado en un limbo y, por fin, he podido volver a sentarme y sentirme en uno de los vehículos de la estilosa marca francesa.
En el texto que lees, la unidad evaluada ha sido un DS 7 Crossback E-tense 4×4 con acabado Antoine De Saint Exupery. Un nombre de coche largo para un SUV grande, ahora ¿también para un gran SUV?
Pues, para empezar, por sus dimensiones y, sobre todo, por su planta en vivo, es imponente. Mide casi 4,6 de largo, se acerca al 1,9 de ancho y sobre pasa el 1,6 de alto, ahora, de cerca, parece todo un buque insignia.
Te puede gustar más o menos la fotografía del DS 7 en cualquiera de sus perspectivas, ahora, a mí me encanta porque no es un SUV más.
Por su diseño, resulta tan agresivo como elegante, cuenta con elementos propios de un vehículo de planta deportiva, pero vestido para una ocasión de gala, llama la atención aunque sin estridencias. Es decir, busca un balance entre lo elitista y lo distinguido.
Nada más entregarme las llaves del mismo, ya a bordo del DS 7 con equipamiento Antoine Saint Exupery, me pasó como la primera (y la segunda) vez, porque con esta es la tercera ocasión que tengo de hacer una prueba de un DS 7, me pasó como en otras ocasiones: sentí vértigo.
Si ves el logo de DS, la fusión de las letras en un sin fin triángulos, rombos, romboides… ángulos obtusos enfrentados por aquí y por allá, con lados apoyados entre sí y dispersión de las formas más curiosas de combinar ambas letras, hacen que cueste encontrar, a primera vista, desde el botón para bajar la ventanilla como el de arranque del coche.
He de reconocer que, una vez ubicado en el asiento del DS 7, me tomó algunos minutos encontrar el pulsador de encendido del vehículo… no recordaba que se encontraba «sujetando» uno de los aspectos que más me gusta de los DS Automobiles: el reloj B.R.M. analógico de la consola central.
https://youtube.com/shorts/S63CblyLPMY
Una «pijada» más que suma en un coche repleto de detalles que lo hacen distinguido entre la marabunta de SUV normales y corrientes que inundan el mercado.
Como te decía, nada más sentarme en la butaca del comandante, uno se siente como en un sillón presidencial a la vez que presto para entrar en acción. Su ergonomía y la cobertura en materiales nobles le confieren un empaque portentoso. Aspecto e impresión que replica en el resto de plazas, otras 4 más, en total, 5.
El puesto de mandos se complementa con un volante estiloso que esconde unas levas para gestionar la caja de cambios automática de 8 velocidades las habituales palancas que gestionan intermitentes y limpiaparabrisas et alt y, aunque nada agraciada, otra para el control de crucero y limitador de velocidad, analógica y práctica, algo que se agradece cuando circulas con un DS 7 por autopista y quieres gestionar o la velocidad constante o máxima a la que quieres viajar.
Volviendo a las sensaciones, confort y habitabilidad del DS 7 Antoine Saint Exupery, la unidad probada contaba con sistema y programa de masajes para los asientos delanteros. No hay cosa que me guste más que sorprender a mi mujer en pleno viaje con la activación de estos chismes… Y ella que lo disfruta y agradece.
Sin ser incómodo no es nada sutil: el trabajo fisioterapéutico resulta mecánico y artificioso, he y hemos probado otros coches con este tipo de bondades mucho más elaboradas. Aunque, si se tiene, se usa, sobre todo en viajes largos, como ha sido nuestro caso.
Retomando el análisis del equipamiento Antoine Saint Exupery, la presencia, tanto en cuanto al diseño como a la vistosidad, de su configuración, hace que estar dentro de un DS 7 sea una fuente de distracción y disfrute. Desde el tacto a la vista, pasando por el olfato, encuentran motivos para estar activos y motivar al cerebro en busca y procesamiento de más.
Detrás se viaja muy cómodo, pero muy mucho. Es comodísimo, es más, es cómodo hasta para tres adultos. Además, gracias al techo panorámico retráctil, el espacio físico real aumenta gracias a la sensación de aire desde la cúpula.
En general, el coche se siente un vehículo de clase superior, quizás le falte un punto para decir elitista en el máximo sentido de la expresión. Es premium respecto de la marca matriz, pero no lo es respecto de otros rivales del DS 7 tanto europeos como orientales, como puedan ser el Jaguar F-Pace o el Mazda CX-60 que, para mi criterio, están un puntito por encima porque se sienten más elitistas.
La conducción del DS 7 híbrido enchufable de tracción integral
A pesar de lo que pueda parecer, el DS 7 PHEV resulta bastante ágil en movimiento, más aún, lógicamente, en vías rápidas, pero salvo por sus dimensiones, en ciudad se mueve de forma resuelta lo cual se agradece cuando uno lo usa como coche para sobrevivir a las rutinas en la urbe.
Volviendo a lo que es la propia conducción en sí, este vehículo se mueve en general y con contundencia ya que estamos hablando de un SUV potente, de 300 CV de potencia máxima a partir de la suma conjunta del motor térmico 1.6 turbo, de 200 CV y 300 Nm, más el sistema eléctrico, que dispone de dos propulsores: el del motor que se sitúa en el eje delantero de 110 CV de potencia y 320 Nm de par y el otro, que se ubica en el posterior, de 113 CV y 166 Nm.
A pesar de esto y para finalizar pronto con esta posible duda, en ningún caso el DS 7 es un todoterreno, ni con la tracción total activa, porque no tiene cualidades arquitectónicas para ello. En todo caso, es conveniente activar este modo cuando el pavimento es deslizante o bien hay dificultades para traccionar, pero sobre asfalto o, en todo caso, arena, pero no se me ocurriría recomendar este coche como SUV para hacer off-road, para eso ya hice un artículo que tienes disponible pinchando en el enlace.
Retomando lo que creo que es más interesante para el interesado en comprar un DS 7 híbrido enchufable, es la lógica tendencia que creo que le dará a usar este vehículo sin recurrir al consumo de gasolina, es decir, a moverse en modo eléctrico.
Y para esto es clave el buen hacer del sistema de regeneración eléctrica llamado, en este caso, E-Save que, sacrificando un poco el gasto de combustible, en movimiento recarga de manera muy sustancial la batería, algo que es interesante hacer, sobre todo, cuando el terreno acompaña (pendientes a favor, por ejemplo).
Es fácil compaginar este método y el enchufado a la red para tener casi siempre disponible electricidad con la que moverse en este SUV PHEV.
Pues bien, es cierto que, si bien el coche está muy bien resuelto en cuanto a aislamiento acústico propio (motor térmico y demás componentes que puedan generar ruido en el interior), es delicioso moverse sobre todo en entorno metropolitano en modo eléctrico (salvo por el también explicado gran peligro que tiene circular en modo eléctrico).
El DS 7 en modo eléctrico resulta inmediato en cuanto a la entrega de su poderío, pero a la vez, en movimiento y siendo suave con el uso del acelerador, de por sí, ya que los propulsores eléctricos son administrados por la electrónica del vehículo para adaptarse y trabajar de la forma más eficiente.
El consumo del DS 7 híbrido enchufable
Para poder dar unos datos de consumo de gasolina del DS 7 PHEV reales, de una parte, hace falta hacer un test de recorrido suficiente para acabar con toda la carga eléctrica (hasta 14,2 kWh, teóricos, se pueden almacenar en la batería) y luego recorrer solo con gasolina el resto. Mis pruebas me dan, a su vez, un promedio de 1,9 litros a los 100 cuando uno dispone de toda la carga disponible.
Luego, cuando el coche se queda sin ella, y aunque suele regenerar bastante rápido y aplicar en cuanto se puede pequeñas dosis eléctricas, el gasto de gasolina se queda algo por debajo de los 7 litros (6,7-6,9), lo cual no está tampoco nada mal ya que este vehículo pesa, en vacío, 1,9 toneladas, que si le sumas solo el conductor, se te mete en casi los 2.000 kg.
Valoración y opinión sobre el DS 7 Plug-In Hybrid AWD
Vamos a empezar situando que el precio del DS 7 PHEV AWD con acabado como el de este test parte desde algo más de 60.000 euros, que no es poco. Pero está claro: es un lujo de coche, en todos los sentidos.
Para mí, si me gastara esa cantidad debería llevarme un coche de lujo, tal cual, pero es que éste lo es.
Además, puedes encontrar coches chinos con calidades y, sobre todo, estética hasta relativamente parecida por menos precio, pero lo cierto es que acaban pecando de algo.
Los DS son coches de alta gama de Citroën, también eso se nota. Acostumbrado a un Citroën como llevo décadas y conociendo cómo han ido mejorando con los años, DS no es un Citroën caro, es cómo entiende la marca su lujo en sus coches.
Comparado con otras marcas, pues sí, hay marcas premium que tienen coches más ostentosos, más exóticos y más caros, pero el DS 7 Plug-In Hybrid AWD resulta relativamente coherente si se valora lo que cuesta y lo que ofrece.