Prueba: Ford Ranger Platinum 4WD V6 3.3 Turbodiésel
13 noviembre, 2023Probamos la Ford Ranger Platinum, una pick-up de lujo que bien puede hacer las veces de camioneta para llegar a la casa de campo de fin de semana que para la casa de la ciudad de lunes a viernes
Poco tiene que decir el aspecto de la camioneta Ford Ranger Platinum. Se puede resumir como espectacular. En el sentido completo del adjetivo.
Ahora, si nos centramos en cómo su comportamiento, la cosa es diferente. Por eso, vamos primero a lo primero, después, a lo segundo. Obvio.
Habitabilidad y confort del Ford Ranger Platinum
Recuerdo que el primer asiento en el que me senté en la cabina del Ford Ranger 2023 fue en la trasera derecha. Lo hice porque me la traía un amigo que ya se encontraba en el asiento del conductor y, como, además venía trajeado, le dije que era mi VTC ideal.
Bromas al margen, una de los puntos fuertes del Ranger Platinum con un precio próximo a los 60.000 euros es su confort. De hecho, descuadra porque, una vez que te acomodas, podrías pensar que te encuentras en una berlina de alta gama de esas destinadas a viajes de largo recorrido o a albergar ocupantes de alta alcurnia.
Delante, la pick-up de Ford, ofrece una posición como se espera: elevada y soberbia. El despliegue de materiales nobles y lustrosos puede llegar a ser similar a la de furgonetas de alta capacidad transporte de viajeros, es más, salvo por la conducción, me recordó a las sensaciones que tuve, años ha, al volante de la Mercedes EQV.
Esta Ford Ranger de doble cabina tiene una caja de carga que equipa bondades como por ejemplo, las tomas de electricidad de hasta 400 W.
La conducción en asfalto del Ford Ranger de 2023
Como decía, al volante de la camioneta Ford Ranger Platinum es propia de un vehículo tan grande, tan alto y tan potente.
El coche se maneja torpemente sobre el asfalto de la ciudad, obvio. Con una batalla de unos 3,3 metros para un vehículo de otros casi 5,4 m de largo; 1,92 de ancho y 1,88 de alto meterlo por calles estrechas, giros contundentes e, incluso, parking subterráneos se puede convertir en una verdadera aventura, mayor incluso que si te la llevas campo a través.
En vías interurbanas y rápidas resulta hasta emocionante, a base de poderío. Gracias a su motor turbodiésel V6 de 3.3 litros de cilindrada, que eroga más de 240 CV y hasta 600 Nm de par, pegarle un pisotón para coger velocidad es uno de los momentos más entretenidos que pude tener a lo largo de la prueba del Ford Ranger 2023 en su configuración Platinum.
Esto conlleva tener un vehículo gastón. Tampoco debería extrañar a nadie que el consumo del Ford Ranger, se vaya a unos 12 litros a los 100 de gasóleo de media, habida cuenta de que, solo de por sí, el peso del Ranger Platinum V6 es de casi 2,4 toneladas, .
La Ford Ranger Platinum en modo off-road
Nos hemos llevado a probar la Ford Ranger Platinum del asfalto para meterlo por tierra y barro.
Uno de los puntos críticos en todo coche es el de la monta de neumáticos. En el caso del Ranger equipaba unas ruedas GoodYear Wrangler Territory HT.
Las citadas ruedas del Ranger Platinun usadas en este test son unas All Season y All Terrain. Es decir, unas ruedas que penalizan las aptitudes off-road en favor de mayor capacidades en asfalto sin ser deficientes en ninguno de estos escenarios, pero tampoco excelentes en ninguno.
La sensación que da la Ranger Platinum en tierra es que va sobrada siempre y cuando la cosa no se complique. No hemos podido llevarla a zonas especialmente extremas, a lo sumo, arenas sueltas y fangos poco profundos de los que ha salido tal cual ha entrado: como un Miura.
Pero, es cierto que nos deja la idea de que este vehículo está más enfocado hacia un usuario poco aventurero pero muy exigente en cuanto al confort y a la habitabilidad.
Utilizando la comparación, el Ford Ranger Platinum es algo así como el Defender dentro de los todoterrenos, un vehículo de lujo que va muy bien en actitud off-road, pero que si lo que se busca es un todoterreno aventurero el Wrangler es el t-o-d-o-t-e-r-r-e-n-o por antonomasia.
Es decir, mientras que la Ford Ranger Platinum sería la pick-up de un caballero calzado con botas negras de caña y chaleco verde sobre camisa beige a cuadros que viene de su semanal paseo a caballo, la SsangYong Musso Sports que probamos, por ejemplo, sería la camioneta del urbanita pero aventurero de pantalón cargo arena, camisa de leñador amarilla y botas de montaña que se echa al monte a disfrutar de la naturaleza que surja.