Prueba: Subaru Crosstrek 2.0 Active

Probamos el Subaru Crosstreck, el reformulado Subaru XV que apuesta también en esta nueva generación por presentar las características propias de un crossover que nada en entre dos aguas

Y es que, cuando uno se sube a bordo del Subaru Crosstrek y ve que existe una posición en el selector de la caja de cambios, designada con una L, y que bloquea la caja de cambios a unas determinadas revoluciones para poder funcionar en modo offroad, se le ilumina la cara.

Estética del Subaru Crosstrek

Exteriormente, el Subaru Crosstrek nos ha recordado mucho a un hermanito suyo, el Subaru Impreza, que ya tuvimos el placer de probar en estas líneas; sin embargo, a diferencia de aquel, el Crosstrek añade unos pasos de rueda más grandes, así como unos paragolpes que delatan su espíritu aventurero y montaraz más allá de la típica autovía o de la ciudad.

Sus medidas son de 4.49 x 1.80 x 1.60 m. de largo, ancho y alto, respectivamente, que le sitúan como un SUV de tamaño mediano, apto tanto para ciudad, como para viajar con él si se precisa, como veremos en el apartado referente al interior.

Aditamentos propios de SUV aparte, este Subaru se caracteriza por tener una parrilla de grandes dimensiones, a la moda actual, así como una firma lumínica que incorpora LEDS, y unas luminarias traseras con unas forma acertada hacia el interior del maletero.

Interior del Subaru Crosstrek

Si bien hablábamos antes de que el exterior era muy similar al del anterior Impreza, el interior es el clásico de Subaru en sus últimos modelos, un interior que, en algunos aspectos, se ve un tanto desfasado si lo comparamos frente a coches de la competencia, donde lo digital ha proliferado y desplazado a lo analógico.

Tras el volante, nos encontramos con un cuadro con dos esferas analógicas, con la única concesión de una pantalla digital entre ambas esferas, y que nos recuerdan que desde Subaru se pone más énfasis en otros aspectos en lugar de priorizar la modernidad.

La pantalla central, integrada en el salpicadero en posición vertical, mantiene el mismo diseño de otros modelos de la marca, y presenta un funcionamiento algo lento; si bien mantiene mandos físicos para el manejo de la temperatura del clima, entre otros.

Respecto a la habitabilidad interior, esta es buena, pues se dispone de espacio suficiente para las piernas de los pasajeros traseros, si bien se ve mermada la capacidad de carga de su maletero, ya que solo cubica 315 litros, algo escaso si necesitamos viajar con mucho equipaje.

 

Motorización y caja de cambios

El motor, un 2.0 bóxer de 4 cilindros, dispuestos en formación tipo bóxer (cilindros opuestos, como es tradicional en Subaru), eroga 136 cv, y trabaja de manera conjunta con un motor eléctrico de 17 cv, que ayuda a bajar los consumos y le otorga la etiqueta ECO de la DGT.

Dicho motor va asociado a una caja de cambios tipo CVT, de variador continuo, que trabajan de forma eficiente siempre y cuando nos ea necesario exigir al motor más de la cuenta: si se pisa a fondo el acelerador, el modo molinillo» se hará presente, aumentando el ruido sin afectar en exceso a la aceleración.

Igualmente, como también sucede en otros modelos de la marca, se incorporan dos modos de conducción: el denominado i-Drive y el Si-Drive, que mejora levemente la respuesta del motor a las exigencias a las que le sometemos desde el acelerador.

Respecto al sistema de tracción total, el Subaru Crosstrek monta el proverbial sistema de tracción de Subaru, denominado X-Mode, que funciona de forma permanente y que incluye un útil y necesario control de descenso de pendientes.

Los consumos que nos ha hecho este Subaru Crosstrek, en un uso mixto de ciudad y carretera, con algún escarceo de autovía, han sido de 7.7 litros a los 100, levemente alto aunque, para un vehículo con tracción total y caja de cambios automática, no resulta excesivo.

En marcha a bordo del Subaru Crosstrek

Se trata de un vehículo cómodo, que nos permite desplazarnos del punto A al punto B con mucha suavidad y confort de marcha, sin grandes pretensiones en cuanto a las prestaciones y que cumple más que sobradamente con el cometido de servir de medio de transporte.

Los sistemas de ayuda a la conducción, con el ya consabido iSight, que escanea al conductor y «vigila» para evitar posibles distracciones; en la práctica, nos ha avisado si apartábamos la vista de la carretera para subir la temperatura del climatizador.

Sin embargo, uno de los puntos fuertes del Subaru Crosstrek y que lo alejan del típico SUV normal y corriente, es su magnífica altura libre al suelo, de 220 mm, lo que unido al sistema de tracción toal, hace que sea uno de los mejores SUV todo-camino que hemos probado.

Conclusiones finales y precio

Si eres fan de la marca nipona, el Subaru Crosstrek no te defraudará: su motor bóxer tiene un sonido fino, aunque algo tosco en combinación con la caja de cambios CVT que equipa, y su sistema de tracción total hará las delicias de cualquiera que guste de la conducción off-road (sin estridencias, claro).

El precio del nuevo Subaru Crosstreck, según el configurador de la marca, parte de los 32.000€ (sin posibles descuentos), siempre que escojamos el acabado Active y en el mismo color rojo de la unidad de pruebas, pudiendo ascender hasta los 37.000 € si escogemos el acabado Touring.