Prueba: Suzuki Vitara 1.5 4×4 Strong Hybrid GLX

Prueba: Suzuki Vitara 1.5 4×4 Strong Hybrid GLX

7 junio, 2023 Desactivado Por Miguel Lorente

La prueba del Suzuki Vitara 4×4 Strong Hybrid nos ratifica que aún hay un pequeño grupo entre los SUV de todocaminos útiles en ciudad y aptos para salir el campo

Tenía ganas de subirme a un Vitara, no voy a negarlo. Ese halo de todoterreno venido poco a poco a SUV me suponía curiosidad por eso, tras probar el indiscutible todoterreno de Suzuki, el Jimny, luego el S-Cross, era hora de hacer la prueba del Suzuki Vitara.

Suzuki Vitara 4×4, ¿un todoterreno venido a SUV… seguro?

25 años han pasado desde su llegada y, la verdad, los últimos parecen haber supuesto la hibernación (estética) de este coche que en su última generación se presenta como lo ves, salvo por detalles, desde hace ya más de 6 años se presenta casi como lo ves. Pero este coche se mantiene fresco y es lo que importa.

Es mucho más rudo que el S-Cross que ves abajo, por ejemplo, pero, a la vez, más afilado, por ejemplo, del que considero rival directo (al menos por concepto y patria de origen) como es el Subaru Forester que también probé pero alejado de bestias pardas como el Wrangler o el Defender que juegan en otras ligas, incluso entre sí.

En cualquier caso respecto de la estética, que te guste o no el Vitara es tu criterio. A mí me gusta salvo por detalles con los que podría vivir, como la parrilla y las barras cromadas que la cruzan verticalmente, en cuanto a gustos estéticos cada uno tiene sus cánones y así descarta o acoge. En mi caso, acojo y mucho pero quizás en otro color.

La habitabilidad del Suzuki Vitara GLX

Respecto del interior del Vitara, la unidad de test que tenemos corresponde a uno del acabado de Suzuki GLX, es decir, el tope de gama.

Mientras que me llamó la atención la tapicería del S-Cross, los asientos del Vitara con equipamiento GLX lucen una tapicería en materiales de mayor calidad y mejor presencia mientras que luego aparecen otros elementos que dejan fríos como los aireadores plegables por donde entra el aire caliente o frío del sistema de climatización o el cuadro de instrumentación, aún dependiente de dos esferas analógicas que flanquean a una pequeña pantalla a color que hace las veces de ordenador de a bordo,  propios de otras décadas e incluso de vehículos de corte más económico pero que no son impedimento si lo que buscas es ser práctico, que lo es.

Pero desde la posición de conducción el Vitara mola. Es lo suficientemente cómodo para considerarlo un «todo terreno»* ya que pasa de ofrecer una vista propia de un monovolumen familiar de ciudad para luego permitir una buena visión con la que afrontar terrenos moderadamente rotos y escarpados propios de zonas agrestes.

En movimiento, desde este puesto de mando, resulta un automóvil cómodo para diario, he pasado 5 de los 7 días que lo he tenido yendo y viniendo al trabajo (30 km por vías inter y urbanas) para hacer el fin de semana un viaje de media distancia (menos de 300 ida y vuelta) por autovías y secundarias al pueblo donde poder probar su actitudes off-road y no tengo más que buenas sensaciones desde el asiento principal. El del acompañante es igualmente confortable o más por prescindir de la columna de dirección y el volante, lo que se transforma en mayor libertad para el copiloto.

Detrás he llevado a mis dos peques, en sendas sillas y, aún y con todo, podría haber viajado, algo compactado, un acompañante adulto, eso sí, delgado y no demasiado cómodo en el asiento central pero correcto si se trata de un trayecto corto o circunstancial.

El Suzuki Vitara ofrece un maletero de 289 litros, sin duda condicionado por el equipo híbrido que reduce considerablemente su capacidad de alojamiento, comparándolo con la otra configuración 4×4 pero híbrida ligera, la del motor 1.4 T MHEV, pierde 73 litros, que no son pocos.

Esto deja el maletero del Suzuki Vitara Strong Hybrid limitado pero práctico por sus formas donde cabe perfectamente una maleta familiar de gran volumen o varias de tipo cabina por no decir que te puedes llevar la compra mensual del hipermercado sin problema.

Suzuki Vitara Strong Hybrid, mejor que un PHEV

Cuando la marca me informó de que el ejemplar de la prueba del Suzuki Vitara sería un «Strong Hybrid» pensé que tendría que conformarme con otro coche con etiqueta ECO que se acogía a ello gracias a equipar «una pila» y obtener así la ansiada pegatina de la DGT y poco más…

Pero no porque gracias a su acumulador de 0,84 kWh y su capacidad de regeneración energética me reafirmo: ¿quién quiere un PHEV mientras haya HEV capaces de llevarte el entre el 100 y el 80 por ciento de un trayecto corto en modo eléctrico?

Este coche me ha permitido hacer desplazamientos urbanos sin recurrir a la gasolina o moverse en vías limitadas a 90 sin gastar combustible durante varios kilómetros, todo gracias a su sistema motriz híbrido que cuenta con un motor de 33 CV que se suma al térmico 1.5 atmosférico de 102, en total, hasta 116 CV que son dirigidos a una caja de cambios AGS automática de 6 velocidades y que se puede gestionar por levas.

Esto permite obtener unos registros de consumos por debajo de los 6 litros de media ya que homologa una media de 5,8 y, de hecho, yo he logrado quedarme en 5,6 en la global de mi prueba del Suzuki Vitara 4×4 Strong Hybrid.

Suzuki Vitara Hybrid, el coche del y p’al pueblo

Pero te voy a ser más sincero que nunca, y mira que en Divex Motor no nos cortamos, porque este vehículo creo que se lo merece y es que me ha encantado. Tanto que me está obligando a replantearme si no ha llegado el momento de cambiar mi vehículo familiar deportivo de tracción integral japonés por otro vehículo también familiar, también deportivo y también de tracción integral y también japonés… (este Vitara, por si te he perdido entre tanta similitud pero a la vez alejada concepción)

Pero ese es otro tema que quizás aborde y dé para otro artículo, lo que aprovecho para animarte a suscribirte a nuestra newsletter y así no perderte las nuevas entradas del blog.

Me explico: por circunstancias familiares, voy frecuentemente por tierras alcarreñas. Como ves en esta prueba del Suzuki Vitara 4×4 me he ido a un pantano, al de Entrepeñas, a rodar con él para, precisamente, probarlo.

Es en este emplazamiento donde ya me he llevado todos los todoterrenos que he probado y algún que otro SUV con aptitudes para hacer off-road y es precisamente por esa comparativa con otros por la que este último que nos ocupa me ha demostrado ser uno de los más capaces que he cogido en los últimos años.

En zona rústica como lo es Sacedón, mi «base de operaciones rural», me he movido con él tanto por su casco urbano como por sus alrededores y, salvo por lo que te contaba de las ruedas, que sin duda, yo le metería unas gomas más de tipo All Terrain que las que llevaba, el Suzuki Vitara Strong 4×4 Strong Hybrid va fenomenal.

Es cierto que las calzadas de pueblo no son como las de una ciudad, aunque a veces, incluso las de localidades más metropolitanas son peores, por su desgaste, por ejemplo, pero en cualquier caso, la variedad de superficies por las que he rodado me ha permitido probar, salvo en nieve, lo bien que se porta este 4×4 híbrido.

Conclusión tras la prueba del Suzuki Vitara 4×4 según su precio, opinión y valoración de compra

Y si tenemos en cuenta que el precio del Suzuki Vitara parte desde poco más de 24.000 euros y que uno como el que he probado hace lo propio desde poco más de 32.000 (32.295), comprar un Suzuki Vitara Strong Hybrid puede ser toda una jugada maestra para quien busque un coche familiar con etiqueta ECO para la vida diaria en la ciudad y que a la vez quiera un vehículo con el que echarse al monte los fines de semana a pasar un buen rato haciéndose una escapada montaraz.

*Todo terreno: me acojo a esta modificación personal que utilizo para describir a un vehículo apto para todo (tipo de) terreno que no es lo mismo que la primera acepción del diccionario RAE de todoterreno.

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